sábado, 2 de abril de 2011

Continua:Cuentos de provincia " El treinta_treinta" 2_IV_2011 20.30 hs.

Con sus ideas, me empezó a embaucar." Quezque usted nos compraba nuestras tierras, para con el tiempo quedarse con todo el valle, ¡imáginese! y quezque ser el dueño de todo le pueblo, quezque como sus hijos son todos hombres, al rato harían de las suyas con nuestras hijas, y no se qué fregaderas más me decía" También me decía que eso de la ayuda era nada más para hacernos entrar en confianza y que después vendría lo bueno, cuando usted se decidiera a quitarnos nuestras tierras.
__ No, "prieto" estás en un error, yo los ayudo porque yo también fui pobre, y más que ustedes; yo llegué aquí sin nada, tu ya lo sabes, y a fuerza de trabajo he llegado a juntar lo que hoy tenemos. Lo de las tierras que me venden, es porque ya decidieron, eso, como ultimaa salida de sus problemas. Pero yo siempre les ayudo a que se queden aquí, en su tierra, a sembrarla, y no irse por ahí a andar penando en otros lugares que ni conocen, que ni saben qué suerte tendrán. Prueba de esto, es que a tu hermano; tu ya lo sabes, le presté dinero sin ningún interés, porque nunca lo hago y confio en su palabra, no les hago firmar nada; para que se levantara y no me vendiera sus tierras . Y ya lo ves, del año pasado a acá se ha levantado, porque este año va a levantar dos cosechas ¿No es cierto? así que quítense esas ideas de la cabeza.
__ Si, don Javier, yo si, pero mi hermano ya no...__ Volvió a llorar y a limpiarse la nariz y las lágrimas con la manga de la chamarra__ Pues ahí le va lo que usted quiere saber. Nos habíamos puesto de a cuerdo para que entre los dos, y otras gentes que jalaran con nosotros, después de hacerles la vida cansada a usted y a sus hijos.¡Hay estuvo la fregadera! ¡Dios santo! Porque lo primero que habíamos urdido era herir a su Luis, hora que supimos que iba a regar  y que iría solo hasta la compuerta. Pero como el muchacho se sabe defender, pues no creo que se hubiera salvado de morir. Obra de Dios que le tocó salvar a mi hijo que se cayó al canal por estar jugando en el puente que va para Dorantes, eso hizo que se me olvidara el asunto ¡ Y te agradezco que "ahigas" salvado a mi escuincle. Luis! __ Me dijo, y siguió__ Por un momento se me olvidó el dizque coraje, que se me había hecho, y que me desquito con mi hermano, porque cuando le disparó a su hijo Luis, por poco y mata al mío.
NOTA:continuará en la próxima entrega.
Gracias por seguir leyendome nuevamente: alberto trejo juárez 

1 comentario:

  1. Sigo esperando y recibiendo con mucha alegría tus cuentos:Gracias
    altrejua

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